sábado, 14 de agosto de 2010

MI SANGRE PRECIOSA LES CUBRE. MI MISERICORDIA VA DELANTE DE CADA UNO, PARA QUE NO SE PIERDAN.





MENSAJE DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO
A SU HIJA AMADA, LUZ DE MARÍA.
2 DE AGOSTO 2010



Amadísimos hijos:


MI SANGRE PRECIOSA LES CUBRE.
MI MISERICORDIA VA DELANTE DE CADA UNO, PARA QUE NO SE PIERDAN.

Hoy, más que en otro instante, deben permitirse unir la voluntad humana con Mi Voluntad, para que sea uno el camino, uno el sentir, uno el pensamiento, una la acción, uno el corazón, UNA LA VOLUNTAD.

El hombre no puede continuar viviendo lejos de Mí, tiene que reaccionar y regresar con SU PASTOR, para que lo mundano no le continúe acercando a la destrucción.

Cuanto ha sido creado, ha sido para cada uno de ustedes. Y con consentimiento humano, cuanto ha sido creado, ha sido destruido. Falta agradecimiento de parte del hombre, para con Su Señor. Este proceder ha llevado a la humanidad a este instante presente, en donde Mi Amor les acercará para que no se pierdan más almas.

OMITEN MIS LLAMADOS Y LOS DE MI MADRE.
LA CONVERSIÓN LLEGARÁ AL GÉNERO HUMANO,
POR MEDIO DE MI MANO DE JUSTICIA Y DE MISERICORDIA.

No son sinceros con ustedes mismos y enmascaran las señales de los tiempos, no miran cuanto acontece en el mundo entero. La humanidad es insensible al dolor de sus hermanos. No miran el cambio de la naturaleza, no miran lo vertiginoso del día, no miran cuánto se ha acelerado el tiempo.

Mi Creación reclama su lugar, y desplaza al hombre, que la ha maltratado.
Los animales perciben cuanto se avecina, han cambiado sus hábitos, ellos no pasan por alto lo que toda la Creación anuncia a viva voz.

El hombre, dotado de inteligencia, en este instante permanece sin percibir cuanto el Cosmos le grita. Muy pronto, el tiempo se acortará ante un nuevo crujir de la tierra. Donde hoy tiene hielo, verán fuego.

Este acelerar del tiempo, acarrea en el hombre un apresurado caminar hacia el pecado, en ese aferrarse a lo transitorio.

MI CORAZÓN SUSPIRA POR LOS MÍOS. MI MISERICORDIA RECLAMA A MI PUEBLO.

Con una clara señal en el Cielo daré la oportunidad a Mis hijos para que se enmienden, antes de que la oscuridad entre en el ser y la conciencia doblegue al hombre.

SON MIS OVEJAS Y ESTE PASTOR VIENE A REUNIR A SU REBAÑO.


No resistan a Mi Amor.
Mi iglesia será triunfante.
No teman, el mal no prevalecerá.



LES AMO. SON MI PUEBLO. VENGAN A MÍ.

Queden en Mi paz.



Su Jesús.

AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.


COMENTARIO DEL INSTRUMENTO SOBRE EL MENSAJE


Hermanos (as):

LA PRONTITUD DEL AVISO DEJA MUY CLARO,
QUE EL HOMBRE; IMAGEN Y SEMEJANZA DE DIOS,
TIENE QUE REGRESAR A SU CREADOR.

La creatura humana continúa negándose a mirar el porvenir nada alentador.

La Mano del Señor ha caído para bien de toda la humanidad. Nos lo dice Nuestro Señor Jesucristo. Los animales sí sienten los cambios de la naturaleza que con diferentes signos nos dice que nada es lo mismo. El cambio climático es generalizado. Pero el hombre no mira de cara el dolor, hasta que lo vive en carne propia. Esa indiferencia ante el dolor del prójimo, demuestra la dureza del corazón humano hacia los llamados del Cielo.

Por esto es precisamente, que Nuestro Señor permitirá para nuestro bien, un prontísimo desarrollo de lo anunciado. No para que le temamos, sino para que nos convirtamos.
Nuevamente la cercanía del Aviso nos remite a prevenirnos espiritualmente.
Así es que no abusemos de la Misericordia de Dios.

Amén

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